miércoles, 4 de noviembre de 2015

TACTO

El perro posee  pelos sensoriales situados sobre los ojos, en la mandíbula inferior, en las mejillas y en los labios. Según las razas pueden estar presentes solamente en los labios y en las cejas. Al perro le son de gran utilidad para poder orientarse en la oscuridad, pero sin llegar a los extremos que se dan en el gato, que en este aspecto esta mucho mejor dotado.
El perro percibe a través de la piel sensaciones tales como el dolor, el frió y el calor que se transforman en señales que viajan por el sistema nervioso hasta llegar al cerebro. El que un perro identifique una sensación como agradable, desagradable o dolorosa es a lo que varia mucho de uno a otro.

GUSTO

Gusto
Entre los sentidos caninos, el deldel  sabores el que menos se ha investigado y a menudo se le ha relacionado con el olfato. Los perros pueden distinguir los sabores básicos de manera similar a los humanos, aunque casi no distinguen el salado. 



Sin embargo, los gustos preferidos pueden diferir mucho de un perro a otro, pues parece que no eligen la comida según el tipo de gusto, sino según su intensidad —fuerte sabor / gusto suave—. Los primeros meses de la vida de un cachorro son bastante importantes en este sentido ya que suelen probar muchos sabores diferentes cuando son jóvenes también desarrollarán un gusto por la variedad cuando sean adultos.